Pesadillas que vuelven
Aun cuando la experiencia histórica resulta abrumadora por sus trágicos resultados, hay una insistencia pertinaz en buscar el “lado bueno” de ese pasado del “socialismo real”. Hay una predisposición a la extrema indulgencia con lo que significó el laboratorio marxista leninista que, muy por el contrario, sería impensable hacia los experimentos fascistas de los años treinta. La persistencia obtusa en caminos equivocados llevará a nuestro continente a un decenio perdido, alejándonos cada vez más de ser parte del mundo desarrollado y arrojando a millones de latinoamericanos a la desesperación de un futuro sombrío sin oportunidades.
04-06-2007
Por Ricardo López Göttig
Por Ricardo López Göttig
2007
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