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06-06-2019

La saga Massa

(7 Miradas) Así como Macri no lo soporta a Massa, ocurre lo mismo al revés. El de Tigre ya fue funcionario de ella, y no fue una experiencia feliz. De modo que eso tampoco lo hace sencillo despejar. La cuestión central es: pesará más el cálculo presente o el futuro.
Por Carlos Fara

(7 Miradas) En la columna del 22 de mayo dijimos: “Por estas horas él está en condiciones de definir quién será el próximo presidente. En política el tamaño no siempre importa, sino ser la pieza estratégica bien ubicada para ser el fiel de la balanza” “Decida lo que decida, Massa no va a mover fichas rápido. Siempre va a dejar puertas abiertas para lo impensable. Pero claro: la tentación será tan grande, que puede inducirlo a error”. Ambas afirmaciones siguen tan vigentes como hace 2 semanas atrás y entran sí o sí en la recta final. Quizá para el próximo número estén despejadas las principales incógnitas.

Aunque pueda aburrir, repasemos cuál es el cuadro estratégico del personaje (desechando por supuesto que se sume a Cambiemos). Básicamente hay 3 grandes opciones:

  • Sumarse al kirchnerismo – PJ: acá la negociación pasa exclusivamente por qué le ofrezcan para él y su tropa;
  • Quedarse en Alternativa Federal (AF): acá el problema es si este espacio sigue existiendo como tal, frente al distanciamiento de Schiaretti y la falta de músculo de Urtubey, sumado al deslucimiento que significaron todas las idas y vueltas con Lavagna y Massa; y
  • Presentarse por su propio sello, el Frente Renovador (FR).

Solo a efectos pedagógicos, el rol estratégico de Massa consiste en que si sale de la grilla presidencial y suma a UC-PJ, los Fernández (F) están más cerca de imponerse en primera vuelta. Sin embargo, vale aclarar que se parte del supuesto que los votos de SM optarán en su mayoría por ella y no por Macri. Como los votos no son de nadie –mucho menos los del tigrense por su perfil- se lo debe mantener en el plano de hipótesis muy razonable.

Que no fue el personaje Massa hasta acá (aunque lo intentó):

  • Cola de león: desde 2013 siempre fue dueño de su posición; y
  • Candidato a gobernador de la PBA: finalmente no lo fue con Macri, y tampoco lo acepta ahora, amparado en el maleficio bonaerense (podrá estar equivocado, pero la historia le da la razón).

En los últimos días en varios reportajes me preguntaron: y si Ud. fuera consultor de Massa, ¿qué le aconsejaría? Aclaremos que es muy difícil opinar sin toda la información sobre la mesa, y buena parte de esos detalles solo los tiene el protagonista en su cabeza. De modo que haré el ejercicio en desventaja.

Aunque a muchos lectores les parezca raro, depende del estómago de cada uno. Así como Macri no lo soporta a Massa, ocurre lo mismo al revés. El de Tigre ya fue funcionario de ella, y no fue una experiencia feliz. De modo que eso tampoco lo hace sencillo despejar. La cuestión central es: pesará más el cálculo presente o el futuro. Porque nada es gratis en esta vida.

  • Lo más fácil: sería quedarse donde está (AF o FR) y defender su opción de tercera vía. Claro que AF es hoy escudería desgastada y con socios poco rentables. Eso le da coherencia, es funcional al gobierno al fragmentar la oposición y evitar que los F ganen en 1ra. Claro que eso no le garantiza nada a su tropa bonaerense, que podría partir sin decir adiós. Nadie sabe si eso le genera un buen negocio presente o futuro.
  • Ingeniería complicada: quedarse dónde está, pero operar la opción Y (llevar a Vidal de candidata a gobernadora). Así preserva a su tropa bonaerense con un seguro de riesgo, y no entra en colisión con su tropa del resto del país. Eso implica un arreglo explícito con el gobierno, obviamente, lo cual genera 2 interrogantes: a) si sus dirigentes se lo bancan ideológicamente pese a la conveniencia política, y b) si sus votantes votarán a Vidal. Eso le genera un negocio presente, pero solo Dios sabe si les genera futuro.
  • Ingeniería sencilla pero proyección imprevisible: el arreglo con los F, porque seguro no tendrá el comando del proyecto en ningún caso, salvo que sea candidato a presidente y ahí puede manotear el joystick. Si es un buen negocio presente dependerá de las negociaciones en concreto (la competencia dentro del PJ puede ser mucho más fuerte), y toda la incertidumbre hacia el futuro porque: a) si ganan los F habrá de todo para repartir, pero si pierden… (no olvidemos que con aún con todo el desastre económico Macri puede ser reelecto), y b) para la mayoría del electorado quedará como que “arregló con Cristina” (¿todo pasa o no es tan sencillo?). Y una más: una vez que te subiste al barco de otro, al minuto siguiente vales la mitad.

Por todo esto –y muchos detalles más que no alcanzan en este espacio- aconsejar profesionalmente a Massa en esta encrucijada es muy complicada (y el que diga lo contrario, miente). Quedan solo 7 días para develar el misterio.

Fuente: 7 Miradas (Buenos Aires, Argentina)

Carlos Fara
Carlos Fara
Secretario
Presidente de Fara Veggetti desde 1991. Lleva 37 años dedicados a la consultoría política. Se especializa en Opinión Pública, Campañas Electorales y Comunicación de Gobierno. Ha recibido varios premios: entre ellos, el Premio Aristóteles a la Excelencia 2010 en el Dream Team del año, que se compone por los diez mejores consultores a nivel mundial en materia de campañas políticas. Ha participado en más de 200 campañas electorales en Argentina y Latinoamérica. Es ex presidente de la Asociación Latinoamericana de Consultores Políticos (ALaCoP), y fue el primer presidente de la Asociación Argentina de Consultores Políticos (AsACoP). Es presidente de la International Association of Political Consultants (IAPC) 2024-2025. Autor del primer libro en español dedicado íntegramente a la profesión, “¿Cómo ser un consultor político?”, que recibió el Premio de ALaCoP al Mejor Libro 2018.
 
 
 

 
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