¡Vos también podés ser parte!
El año 2016 termina con una noticia muy triste: el fallecimiento de Cecilia de la Torre, Legisladora de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el día 21 de diciembre. Así, de repente, se fue una excelente persona y una gran amiga de los demócratas cubanos.
En efecto, a través de sus vínculos personales con autoridades de CADAL, Cecilia de la Torre y su colega Francisco Quintana, abrieron las puertas de sus despachos para escuchar y brindar apoyo moral a quienes en su país tienen prohibido ejercer sus derechos fundamentales.
En los casos de Manuel Cuesta Morúa y Dagoberto Valdés, ambos fueron declarados Huésped de Honor de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires gracias a la iniciativa de Cecilia. Además de reconocer la trayectoria de estas dos destacadas figuras del movimiento democrático cubano, ella entendía la importancia del reconocimiento internacional para activistas de derechos humanos que son considerados inexistentes por la dictadura de su país. Probablemente, estos reconocimientos a Cuesta Morúa y Valdés no tengan precedentes en América Latina.
Cecilia y sus destacados colaboradores, Guillermo Vattuone y Agustín Menéndez, también recibieron al joven Yuniel López, quien vino a Buenos Aires invitado por CADAL a presenciar las elecciones primarias del 2015 luego de haber trascendido su caso como el del opositor que se postuló a la asamblea municipal de su barrio en La Habana, desafiando así al partido único de Cuba.
De la Torre también recibió a su colega abogado René Gómez Manzano, otro destacado referente democrático de Cuba, sumando a otras legisladoras de su partido político, el PRO, en un encuentro para interiorizarse sobre la situación de los derechos humanos en ese país.
Y más recientemente impulsó también con Francisco Quintana la declaración del disidente y diplomático checo Martín Palous como Huésped de Honor de la Ciudad de Buenos Aires, ocasión en la que visitó en la sede de CADAL la muestra fotográfica “El ciudadano Havel”.
Su último gran gesto fue la elaboración del proyecto de ley para que la Ciudad de Buenos Aires adopte el 23 de agosto como Día en Recuerdo de las Víctimas del Totalitarismo, para cuya aprobación tuvo que batallar bastante. Este día, que recuerda la fecha en que se firmó el pacto Ribbentrop-Molotov, fue originalmente adoptado por el Parlamento Europeo y seguido por Canadá. Es casi seguro que la capital de la República Argentina haya sido la primer ciudad de América Latina en evocar el día que recuerda a las millones de víctimas del comunismo y el nacionalsocialismo.
Cecilia María de la Torre nació en Córdoba, el 16 de junio de 1962. Estaba casada con Germán J.M. Martín Irigoyen, con quien tuvo tres hijos: Juan Bautista, Javier y Germán. Se graduó de abogada en 1988, con Diploma de Honor, en la Universidad de Buenos Aires. Desempeñó toda su vida profesional como abogada independiente hasta que asumió su banca de legisladora. Era Profesora de Derecho Constitucional y de Teoría del Estado. Ávida lectora de los clásicos, se interesó siempre por la filosofía, asistiendo a innumerables cursos con los más destacados intelectuales de nuestro medio.