¡Vos también podés ser parte!
(JAI) Cristina Kirchner entró en un terreno de discusión que ya parecía finalizado, como es el de que los judíos son tan ciudadanos argentinos como los de otras denominaciones religiosas. Muchos suponíamos que este tipo de comentarios ya estaban superados, pero la «sospecha» de que los judíos argentinos no son de confiar, o que son otro tipo de ciudadanos, también lo reflotó el senador Miguel Ángel Pichetto, cuando se debatió el memorando con Irán, y distinguió entre los «argentinos judíos» y los «argentinos argentinos»…¿De dónde viene esta diferenciación?
El reciente incidente en el Lago Puelo, en donde un grupo de turistas israelíes fue violentamente atacado por su condición de judíos, nos llama la atención sobre una teoría conspirativa que lleva decenios circulando en Argentina: la del Plan Andinia. Creer en una teoría conspirativa aquieta la mente: nos da una geografía simple del mundo que nos rodea. Ordena, encuadra, hace categorías, ubica a “buenos y malos”. Permite que todo se acomode tras una sola causa que todo lo explica: de allí que resulten tan fáciles de difundir y seguir. Si algún evento o dato la contradice, se la refutará como parte de esa misma conspiración.
El libro de Muchnik es una magnífica forma de conocer cómo se rechazó a los judíos antes, durante y después de la segunda guerra mundial. Su estilo ágil, didáctico y claro, va acompañado de la bibliografía más actual, y con generosidad va subrayando los aportes y conceptos de los autores que también han trabajado en la cuestión.
(Infobae) Podría argüirse que Durán Barba no supo explicarse correctamente. Sin embargo, nos referimos a una persona con formación académica y producción bibliográfica, además de ser un conocido asesor en comunicación política, por lo que sus dichos son aberrantes. Podría decirse, también, que los jóvenes que fueron a rezar en voz alta a la catedral de Buenos Aires lo hicieron por un exceso de fervor religioso, creyéndose llamados a custodiar una verdad revelada; pero probablemente fueran estudiantes universitarios próximos a graduarse y plenamente responsables de sus actos. A estos episodios se le agregan los ataques a iglesias católicas y metodistas en los últimos meses, generando una atmósfera hostil a la libertad de cultos en un país pluralista como lo es Argentina. ¿Son hechos aislados o nuevas manifestaciones de viejos prejuicios?